Por Esperanza Pérez*
Imagina por un momento que eres el capitán de tu propio barco, navegando por las aguas turbulentas del emprendimiento o la vida profesional independiente.
La brisa fresca de la libertad te llena de energía, pero también hay tormentas inesperadas que te sacuden. En esos momentos, la brújula que te guía no es solo tu talento o tu estrategia, sino también tus emociones.
¿Te ha pasado que la emoción te invade y te paraliza? ¿Que la incertidumbre te llena de dudas y te hace cuestionar tu camino? Es normal. Como emprendedores o profesionales independientes, estamos constantemente expuestos a un torbellino de emociones: la alegría de un nuevo proyecto, la frustración de un obstáculo, el miedo al fracaso, la emoción de un logro.
La clave está en aprender a navegar este mar emocional. No se trata de reprimir o negar nuestras emociones, sino de comprenderlas, aceptarlas y utilizarlas como herramientas para nuestro crecimiento.
Un coach ontológico, como yo, puede ser tu guía en este viaje. Te enseño a identificar las emociones que te limitan, a desarrollar estrategias para gestionarlas y a utilizarlas a tu favor. Te brindo herramientas de programación neurolingüística para reprogramar tus pensamientos y creencias, y así construir una mentalidad de éxito.
Aquí te dejo 3 sugerencias prácticas para navegar la montaña rusa de tus emociones:
1. Identifica y Nombra: La primera herramienta de la PNL para gestionar las emociones es la conciencia. Presta atención a tus emociones, identifícalas y dales un nombre. ¿Es miedo, frustración, alegría? Al nombrarlas, las sacas de la oscuridad y las haces más manejables.
2. Reformula tus Pensamientos: El coaching ontológico nos enseña que nuestros pensamientos crean nuestra realidad. Si te invade la duda, pregúntate: ¿qué evidencia tengo para pensar así? ¿Hay otra forma de interpretar la situación? Reformular tus pensamientos te ayudará a cambiar tu perspectiva y a generar emociones más positivas.
3. Ancla tus Emociones: La PNL nos ofrece herramientas para anclar emociones positivas. Elige una emoción que te empodere, como la confianza o la determinación, y asóciala a un gesto o una palabra. Cuando te sientas abrumado, activa tu ancla para recuperar esa emoción y mantenerte en un estado mental positivo.
Recuerda: tus emociones son tu brújula, no tu ancla. Con las herramientas adecuadas, puedes convertirlas en un motor de impulso y crecimiento.
¿Te gustaría aprender a navegar tu mar emocional con más seguridad y confianza? ¡Te invito a visitar mis redes sociales y a participar en mi taller “Exprésate, Crea lo que Crees”! Ahí te enseñaré a gestionar tus emociones para que puedas convertirte en el capitán de tu propio destino.
Te dejo un abrazo lleno de esperanza
*Esperanza Pérez – Especialista en Comunicación y Desarrollo Personal con Enfoque en PNL y Coaching Ontológico
Instagram: @holaesperanzaofficial
Whatsapp: 1123636552
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